miércoles

Tengo miedo

Tengo miedo…

       Yo, a quien nada le afecta, nada le hiere, todo lo supera con una sonrisa en los labios, todo lo ignora mientras sigue cantando.

     Yo que me encierro entre máscaras, entre palabras nunca pronunciadas, entre letras tergiversadas…

Yo… que fanfarroneo de inmutable, invencible, imperturbable…

…Yo realmente me encuentro aterrada.
         Aterrada por la idea inconclusa, por la posibilidad tan poluta. 
Aterrada por esos fantasmas que aún no son palabras, pero que me han quitado la calma.
                  Aterrada por un ser que puede ser…
     Aterrada por el olvido de algo que no querrá renacer.

Tanto miedo, tanto temor… siento que un ataque de pánico hará explotar mi corazón.

      Las manos me tiemblan, las piernas mi peso no llevan, mi corazón acelerado desespera y mi alma…

     Mi alma solo un deseo anhela: que las sospechas nunca sean ciertas y que mi sexto sentido, que grita y martillea, se equivoque en este dilema.

¿Cómo podría reaccionar?, ¿qué podría contestar?, ¿cómo podría perdonar?

        Yo que también lo quiero, pero que encierro mi deseo en el paso del tiempo.
Yo que también lo espero, pero que en muchos puntos concuerdo.

Yo…                        

¿Cómo podría continuar?

     Es presagio y agravio, aspiración y culminación.
                             Es miedo y es confusión, es angustia y dolor.
            Es pensamiento y es infierno, es tormento y padecimiento…
   Es un plan hecho trizas,
Son años convertidos en ruinas.
     Es más de lo que puedo soportar,
                si mi medio se manifiesta en realidad.

Aterra, atemoriza, espanta, amedrenta, acobarda, enloquece y alarma…

Más sobre todo aquello: duele…

    Duele y me llena de rabia, de una frustración que no se puede expresar en palabras.

Duele por el engaño, molesta por saberlo confirmado.
                                        Indigna por tu estupidez, irrita por mi insensatez.
               Hiere por la manera, desilusiona por la pena.
        Aterra por la prueba, me acaba… Me acaba por secuela.
Sólo espero que mi presentimiento no sea cierto;
     que las coincidencias solo existan en mi cabeza,
          que lo que grita verdad sea mentira;
               y que esta desazón sea producto de la imaginación.

Sólo espero…

Y espero porque te quiero y odiarte…


Odiarte no lo deseo, más el perdón no podrá tener voto o razón si la ruleta no juega a mi favor. 

Piérdete "animal feroz"

Me enferma, me enerva, me quema.

¿Y aún así me cuestionas mi falta de confianza? Vil alimaña que me tiene atrapada. Ya por fin observo tu calaña; ya por fin reconsidero los placeres del amor en otras damas.

¿Por qué no puedo yo jugarte con las mismas cartas?

Hay un dicho popular que dice que “ojo por ojo” ante la atrocidad. Con un ser tan despreciable la venganza es lo menos reprochable…

… Quitarte las garras, arrancarte los dientes, doblarte las patas y hacer que me ruegues.

Que la venganza es un plato que frio a de comerse, pero en el que calentar encuentro mi deleite.

Me pregunto cuántas féminas han pasado por tus zarpas, ¿será que si te digo por las mías cuántas, dejarás de ser una alimaña?

 No hay peor que un ego herido, no mayor satisfacción que ver tu orgullo vencido.

O dime tú ‘animal feróz’, ¿no te ‘divertiría’ verme en acción?

Como dama se tratar a otras damas por igual y de placer me hacen vibrar cuando sus gritos se dejan escuchar.

La pasión interminable a la que no puedes compararte; créeme, ni a los tobillos les llegaste.

Tú hace mucho que has perdido la fuerza y los estribos. Ahora sólo intentas llegar a qué ¿15 minutos o unos segundos más?, mejor deja que te pongan el collar, el ‘salvajismo’ contigo está de más.

Tras de patetismo, egocentrismo; ¿no son muchos males para un solo individuo?  

Que raza tan singular la que has decidido emular. No crees que haces menos mal si dejas a tu mierda natural aflorar sin rechistar.

El lobo con piel de oveja hace mucho dejo de funcionar, ni siquiera el perro Sam lo deja ahora pasar.

Acepta tu nimiedad, a mi espíritu deja de fastidiar y vete libre a las putas conquistar.

Te aseguro que no me quieres hacer enojar, tú y yo sabemos que la impaciencia es mi gran mal y la gota el vaso ya quiere rebosar.


Aléjate vil cobarde, pierde aquello que te quedo grande. Yo no quiero hacer gran mal… no me obligues a mi resolución mutar. 

jueves

Me duele ahí

Me duele ahí… En ese lugar donde los medicamentos no tienen efecto, donde lo natural no puede curar el mal, donde los doctores no saben qué recetar.

Me duele ahí… Entre las costillas.

Me duele ahí... justo ahí en medio del pecho, que solo se comprime en un agonizante proceso.

Me duele ahí como si fuera una afección pulmonar que no me deja respirar, como si fuera el corazón ante un infarto terminal.

Y ahí me duele, justo en ese órgano que palpita…

 Ese que antes se movía acelerado por tu sonrisa y hoy se retuerce sin medida preventiva.
Me duele ahí, justo en el alma: En donde ya no valen palabras, donde ya el espíritu se ha cansado de derramar lágrimas.

Me duele ahí en un yo entregado que has roto en mil pedazos… Aquel yo que has dejado con la sonrisa partida y los ojos sin vida.

Y me duele…

Me duele como el karma mal encausado, el anhelo absurdo del desesperado.

Me duele como el recuerdo dulce que no volverá, los momentos de risa que se fueron sin más.

Me duele ahí donde había mariposas, porque ahora estoy intoxicada con sus sobras. 

                            Me duele ahí entre esos cadáveres venenosos que antes fueron prueba de mis gozos.
Me duele en la memoria, con parpadeos fugaces de fatídicas imágenes.

Me duele mi penúltimo acto de amor… Entregarte una confianza que sin miramientos tiras a la nada.

               Me duele y me dolerá aun después de mi acto final: en silencio dejarte marchar.

Y me duele…

Me duelen las lágrimas que ya no tengo, la garganta reseca de tantos gritos internos.

Me duele ese sueño que nunca se hará realidad, la ilusión que está condenada a terminar mal.

Me duele la entrega, la condena, la pena…

Y me duele todo, casi en todas partes, porque todas eran tuyas y tú las destrozaste…

Y me duele aún más, porque no sé cómo me voy a sanar…

Me duele ahí, aquí y allí. Me duele incluso lo que no debería existir.

Me duele el miedo, el mismo anhelo.
Duele la esperanza,
Duele la añoranza.
Duele dormitar,
Duele soñar y
Duele despertar.

Me duele ahí donde te instalaste, donde sólo gastos dejaste.

Me duele todo, porque todo te di…


            …y me duele aún más porque te debo dejar ir, no hay final feliz para mí.